La fresadora portátil es capaz de realizar operaciones de fresado, taladrado, rectificado y otras muchas operaciones de relacionadas con el mecanizado in situ dentro de estrechas tolerancias. Es ideal para trabajos de reparación de grandes superficies cuando el desmontaje no es posible o práctico. La fresadora se puede sujetar directamente a la pieza de trabajo mediante tornillos o soldadura en cualquier orientación. Entre sus características se encuentran desplazamiento variable a lo largo de los ejes X, Y y Z y el cabezal de fresado reversible. Un husillo de bolas, en el eje X permite al eje X desplazar la herramienta de fresado a lo largo de toda la longitud de dicho eje.